Prospección por iñubija

Se realiza un recorrido por las inmediaciones de la cueva de Iñubija. Se toman en el exterior una serie de puntos con el GPS con el objeto de demarcar el contacto de la caliza con el resto de materiales no karstificables. Realizada esta labor y pasados los puntos al mapa correspondiente, se observa con claridad que la galería principal de la cueva se abre siguiendo justo el contacto normal existente. El punto final de la galería principal coincide con una falla normal, como ya habíamos intuido en la morfología interior de la cueva. Esta circunstancia nos puede causar serios problemas para poder dar con la continuación física del recorrido de la cueva. Por otra parte se intuye tambien en el exterior el recorrido subterráneo del meandro lateral explorado la semana anterior al coincidir con un poco desarrolado barranco. La gran incognita que no se ha podido resolver es saber cual puede ser la dirección del curso de agua que circula por la base del meandro y que aun está pendiente de ser explorado. El pozo que quedó sin bajar y por cuya base circula el aporte de agua, coincide exactamente con uno de los extremos de la falla que corta a la galería principal. La exploración de esta incógnita se presenta interesante pero ciertamente no invita demasiado al optimismo. Por otro lado se constata la muy improbable circunstancia de que la cueva de Iñubija pueda contar en este momento con otra boca de entrada ya que en el recorrido realizado no se ha localizado ningún punto por el que se intuya se pueda acceder al interior de la cueva. Esto puede ser una buena noticia dado que de ser así, la fuerte corriente de aire que circula por las galerías de la cueva invitan a pensar que éstas puedan ser numerosas. Las próximas exploraciones irán despejando las siempre bien recibidas incógnitas.